jueves, 7 de marzo de 2013

¿El Gran Dictador?

El Gran Dictador (The Great Dictator, 1940) es una película dirigida, producida e interpretada por el inigualable Charles Chaplin. El británico, un artista del cine mudo, presentó El Gran Dictador como su primera película sonora y fue un gran éxito. La historia es un gran azote a las dictaduras y  una clara parodia del nazismo alemán de Hitler. Además, se dice que el barbero judío de la película podría ser una clara referencia a Charlot, su personaje más famoso, y que esta fue su última aparición. El Gran Dictador obtuvo trece nominaciones a los Oscar, pero no ganó ninguno. Aun así, se trata, sin ningún género de duda, de una brillante película. Controvertida, polémica y adelantada a su tiempo. Merece la pena verla.

Esta semana no podía elegir otro tema. Tras la muerte de Hugo Chávez, escenasdepelicula tenía que centrarse en la actualidad. Además, tener en cartera El Gran Dictador ha facilitado las cosas. No puedo decir que sea un experto en la revolución bolivariana del comandante Chávez, pero hay cosas que me sorprenden especialmente. El gran debate originado en las redes sociales, entre defensores y detractores, se basa en señalarlo como dictador o como salvador de Venezuela. Digo yo, podría ser las dos.

Me hace gracia un cartel visto en facebook en el que aparece el rey Juan Carlos diciendo "un dictador me colocó en el poder y a mi país le llaman democracia" y a Hugo Chávez apuntando "llegué al poder ganando unas elecciones y me llaman dictador". No creo que sea lo más importante cómo se llega al poder, si no lo que se hace con él. No hay que recordar que Hitler ganó sus elecciones...

Tampoco entiendo que muchos que condenan el militarismo defiendan a un comandante del ejército. A un militar que antes de ser presidente por vías democráticas, lo intentó mediante un golpe de estado en 1992.

Otra de las incongruencias que se realizan con Chávez. Supongo que todos aquellos que se quejan de la falta de libertad de expresión actual no sabrán que el ex presidente controlaba los medios de comunicación de su país. Por no hablar de las expropiaciones que realizaba en plena calle al grito de "Expropiado".

Que muchos venezolanos estuvieran encantados con él, no quita para que gobernara como un dictador. Haciendo lo que quería y cambiando leyes a su antojo. Que diera de comer a los más desfavorecidos no quita para que Caracas se haya convertido en una de las ciudades más peligrosas del mundo con cerca de cuarenta homicidios diarios.

No creo que estos sean datos de aplaudir, aunque esto no quita para pensar que personas con su carisma serían necesarias para hacer un mundo mejor y para que no todos estuviéramos sometidos a los caprichos de los más pudientes... En su honor, !aquí huele a azufre¡


1 comentario: